Frases para el recuerdo

El amor es una emocion demasiado fuerte como para ocultarla durante mucho tiempo. Niégalo y sufre las consecuencias. Admítelo y sufre las consecuencias. Destaparlo suele ser vergonzoso o bien puede ser liberador. Y que sea uno u otra cosa,son otros quienes lo determinan.

"Nada graba tan fijamente una cosa en nuestra memoria como el deseo de olvidarla".

Todos tenemos un secreto encerrado bajo llave en el ático del alma.

No hay nunca un porqué para un recuerdo; llega de repente así, sin pedir permiso. Y nunca sabes cuándo se marchará. Lo único que sabes es que lamentablemente volverá.

jueves, 28 de agosto de 2014

Y TÚ, ¿CÓMO MIRAS?, SI ES QUE MIRAS

Dicen que una mirada vale más que mil palabras.
- La mirada callada, que atrapa, que engancha, que se queda estancada como el agua que fluye.
- La mirada estrellada que viene de golpe, de prisa y sin prisas, de frente y de repente.
- El cruce amargo de miradas donde dices mucho y no dices nada, todo y nada y eso pasa.
- Las historias contadas de uno y de otro, los mensajes secretos, los principios felices y los finales amargos.
- La historia inventada y la historia recordada, el futuro y el pasado que ahora queda bien lejos.
- Las miradas robadas que se dan a lo lejos, que se dan sin quererlo, que se cruzan y apartas.
- Las miradas de te quieros y también las de te odio, de esas que matan; las de alegrías y tristezas; las de comienzos y finales.
- Las miradas que te producen chispazos que se convierten en llamas, que se extingue y revive, que nunca se apagan.
- La mirada desafinada, perdida y lejana que se da sin mirar, que se siente pensando.
- La mirada a gritos que te dice mirame hasta que estés frente a mi, hasta que se rocen los labios y el mundo se apague.
- Mil miradas que se dan cada día, diferentes y especiales, y también algunas iguales.
- Ese juego de miradas entre personas desconocidas, amigas, vecinas, amantes, bandidas, o quizás enemigas.
- Ese te miro yo, me miras tú y apartamos la mirada y así todo el tiempo. O quizás el te miro, me miras y mantenemos el juego de miradas hasta que uno se cansa, hasta que uno no aguanta, hasta que alguien estalla.
Jugamos al juego de mirarnos y contamos 100 veces, hasta que yo hable o quizás hasta que tú hables o puede que no hablemos ninguno. Ese orgullo maldito que nos impide hablar, que tienta al juego, al juego sin fin, al juego sin reglas, a ese de pasarlo mal, de querer llevar siempre la razón, de esperar que otro hable; al juego de no hacer lo que queremos, lo que nos gusta; a un juego repetitivo, pesado y amargo y siempre con la duda de quién se cansará antes de jugar a este juego de dos; donde o ambos perdemos o ambos ganamos.

martes, 12 de agosto de 2014

Adios

Ya lo ves me he roto en mil pedazos;
El corazón se ha hecho añicos;
Y te dedico una canción. 
Ya lo ves te rozaré en la esquina;
Encontraré mi espina que se clava en el talón;
Y esta vez, la vida me ha engañado;
Me ha dicho demasiado;
Y he inventado la mitad.
Ya lo ves que el cuento del velero;
Se hunde hoy de nuevo;
Y no quiero regresar.
O tal vez si, se rompen tus pupilas,
Me pierdo en las esquinas;
Y me roba el corazón.
Que esta vez, van pasando los días;
Y me duermo en el salón.
Y me canse, de siempre con lo mismo;

El mismo sueño y el mismo adiós.

Ya verás

Y ya verás cómo es mentira lo que digo y lo que pienso no coincide,
y ya se verá con el tiempo si he querido o he mentido todo el tiempo; 
y veras que he comprendido que en la vida hay errores y aciertos;
y veré si me arrepiento del olvido, del recuerdo, allá a lo lejos.
Los recuerdos del reflejo del espejo se han nublado;
las miradas de campana en soledad se han terminado;
lo imposible ahora es posible o me lo invento;
que no puedo con el tiempo y se ha acabado….
Sentimientos que se borran con el tiempo;
y otros llegan combatiendo la marea;
y es posible que me crea con el tiempo;

que el mañana puede ser definitivo.