Esperando mucho tiempo

Cada persona dedica su tiempo a lo que quiera, unos admisnistran bien su tiempo y otros lo malgastan, unos aprovechan cada segundo del día y a otros no les importa si pasa el tiempo. El tiempo, sencillo y a la vez muy complicado. Pueden pasar mil cosas en un corto período de tiempo y no pasar absolutamente nada en un largo período de tiempo. Hay veces en las que hay que esperar mucho tiempo para que las cosas pasen. Cuando somos niños y se nos mueve un diente, ese diente puede tardar poco o mucho en caerse y nos ponemos impacientes porque deseamos que se caiga cuanto antes. La impaciencia es algo que algunos soportan mejor y otros pues no tanto, la verdad es que hay cosas, pequeños detalles, que en si mismos pueden no tener significado, pero que juntos lo significan todo. Y te das cuenta que no te importa esperar a que esos pequeños detalles lleguen, porque sabes que merece la pena la espera.